Los profesionales inmobiliarios reconocen que, aunque han recibido muchos mensajes y llamadas durante el periodo de confinamiento, la apertura ayer de sus tiendas y oficinas ha sido fría.
Ayer cientos de agencias inmobiliarias levantaron el cierre y sus responsables y comerciales se dispusieron a gestionar la larga lista de consultas en espera. Y es que estos 51 días se ha trabajado, como en el resto de sectores, de una forma peculiar; en este caso sin poder enseñar inmuebles. La vuelta será gradual y no fácil, y la forma de ver y comprar una casa será distinta, al menos durante unos meses.
Podríamos decir que la tecnología ha sido el mejor comercial inmobiliario durante el confinamiento, algunos han hecho búsquedas en agencias y portales por necesidad -inmersos en una búsqueda cuando surgió el estado de alarma-, y otros, por qué no decirlo, por diversión: ¿Quién no ha fantaseado con una casa más confortable y con un respiro exterior durante estas siete semanas?
La tecnología al rescate
Las grandes inmobiliarias como Gilmar o Engel & Völkers utilizan tecnología Matterport, “son experiencias inmersivas 3D mucho más reales que los tradicionales recorridos virtuales de 360º”, aseguran desde la inmobiliaria alemana. Marta Rifà, directora de marketing digital de Engel & Völkers Barcelona, puntualiza que, aunque en el estado de alarma esta tecnología haya tenido un papel fundamental, ya era una herramienta importante desde hace tres años para su compañía: “Es vital para los clientes internacionales ya que la necesidad de este primer filtro se convierte en indispensable por la limitación de tiempo que muchas veces hay en los días de visita”.
En Gilmar, que cuenta con 800 viviendas que pueden visitarse desde una pantalla con esta tecnología, describen el método como “escanear una casa, permitiendo verla como si se tratara de una casa de muñecas, sin paredes ni techo, pero con una imagen real. El usuario puede girar la casa entera para ver todas las plantas, en perspectiva espacial, o entrar dentro y pasear por ella.”
El portal Idealista también ofrece visitas virtuales con esta tecnología desde 2002, donde otras inmobiliarias más pequeñas y especializadas lo utilizan para mostrar algunos inmuebles. Es el caso de Lemon House, agencia inmobiliaria ubicada en Montecarmelo y especializada en la zona norte de Madrid, que muestra a través de este portal inmuebles bajo esta tecnología, como este edificio en la calle Xaudaró en el barrio de Fuencarral. Y aunque en estos momentos la realidad virtual se ve más como una herramienta de ayuda, y no de compra real, desde Engel & Völkers nos comentan que precisamente esta semana han cerrado una operación en La Coruña de un unifamiliar en Oleiros, a las afueras de la ciudad, del que el cliente ha firmado arras sin visitarlo, y que no es la primera vez que cierran operaciones así.
¿Hay mucha demanda embalsada?
Todas las inmobiliarias afirman haber tenido un aumento notable de visitas web durante este periodo y aunque no hayan enseñado inmuebles afirman no haber dejado de trabajar. Según una encuesta realizada esta semana por Idealista a las profesionales inmobiliarios que tienen presencia en su portal, el 68% de los profesionales inmobiliarios españoles ha seguido trabajando desde casa, aprovechando para terminar operaciones iniciadas, actualizando sus bases de datos o realizando acciones de fidelización de clientes. Desde Gilmar nos cuentan, además, que han surgido muchas dudas y aspectos legales que sus comerciales han resuelto a los clientes, sobre operaciones iniciadas y no terminadas o sobre herencias, un caso que por desgracia ha aumentado por motivos obvios tras la pandemia.
A pesar de esta actividad durante estas semanas, solo el 7% de las agencias reconocía tener capacidad financiera para sobrevivir más de 6 meses en las actuales circunstancias, mientras que el 29% la tenía para sobrevivir siquiera un mes. El 47% podría salir adelante si no se alarga más de 2 o 3 meses, el 9% llegará hasta los 4 o 5 meses y el 7% podría llegar a aguantar 6 meses.
¿Cómo reaccionarán los precios?
De nuevo consenso entre todos los profesionales que aseguran, según el estudio de Idealista, que los precios de venta caerán (77% de los encuestados), mientras que el 19% piensa que se mantendrán como hasta ahora. Ningún profesional pronostica subidas de precio. En cuanto al mercado del alquiler, la mayoría (54%) cree que los precios se reducirán y un 39% opina que se mantendrán en los mismos niveles que los que se registraban antes de la pandemia.